legadas estas fechas el autor de este espacio hace honor a su alias y emigra temporalmente a otras tierras. Por muchas vueltas que le demos, el mundo es redondo y al cabo de un tiempo volvemos al punto de partida.
 |
Canicas, mercado de Friburgo |
Alemania, pese a todos los prejuicios zurcidos desde esta península, es un país con lugares de tal atractivo romántico que desbordan la imaginación. Sus habitantes son como en todas partes, unos simpáticos y otros un rato bordes como algunos empleados de Ryan-Air en el aeropuerto de Francfort Hahn. Mientras Merkel, Sarkozy & cía juegan a las canicas con la deuda griega y los mercados, el nómada prefiere internarse por la Selva Negra. De momento estoy ocupado con la tarea de organizar más de 500 fotos.Ya me hubiera gustado traerme de allí la temperatura, unas cajas de vino Riesling y el “bocato di cardinale” que está hecho el pastel de nombre indescifrable, típico de la Selva Negra. Lo sirven con tanta generosidad, que para un trozo se precisan dos comensales o hambre de dos días.
 |
Desde mi balcón en Múnstertal |
 |
Desde la cocina en Münstertal |
 |
Canicas, mercado de Friburgo |
 |
Canicas, mercado de Friburgo |
 |
Canicas, mercado de Friburgo |
 |
Canicas, mercado de Friburgo |
 |
Canicas, mercado de Friburgo |
 |
Canicas, mercado de Friburgo |