Regaderas de guardia

S

ol se ha convertido descaradamente en el rompeolas de las dos Españas, mientras, la displicente policía la emprende a hostias con la manifestación laica. La curia socialista se ha tornado papista hasta las cejas, en medio del infierno bursátil. Tal vez teman la excomunión de las urnas. Hasta en TVE, donde no dan puntada sin hilo, aparecen las presentadoras con aspecto de trance místico cuando informan sobre los actos del JMJ. Sólo falta la musiquilla del NO-DO y el olor a Zotal en los lavabos del cine de barrio.

Regaderas de guardia. Coblenza. Alemania.

Me temo que toda esta algarabía, más que música celestial, sean fanfarrias para tapar los recortes que se avecinan, algún reputado candidato propone la cándida idea de suprimir las diputaciones. Cuando sus camaradas, en el anterior periodo electoral, gestionaban presupuestos desorbitados todo olía a santidad. Ahora que el personal perdió la fe en su partido, resulta que estas instituciones son peores que Sodoma y Gomorra. Si estamos sobrios sabemos que sobran muchas dietas y Visa Oro, para quienes llegaron como Adán y Eva.

Prefiero perderme en el limbo de los jardines, antes que hacer una tesis sobre jardineros improvisados y regaderas de guardia. Os dejo con imágenes de la Buga de Coblenza. Una feria alemana de todo lo relacionado con la jardinería.