Tras la cifra de 14 personas muertas a manos de su pareja en lo que va de año hay mucho más que dos dígitos, hay vidas truncadas, sangre derramada inúltimente es la podredumbre de la colectividad lo que aflora, un virus social que lejos de remitir arrecia, unas denuncias en saco roto, unos políticos manirrotos en gestos de silencios breves para captar los objetivos de los medios masivos, una educación con o sin beca que ha fallado estrepitósamente, siempre la eterna cantinela: hemos tomado medidas, esto no se puede tolerar, estamos dipuestos a atajar...
Para que el suma y sigue se convierta en punto final, para que no haya eximentes ni buena conducta en la mente alevosa digamos NO al sistema y sus rectores. Suma total y doble línea a esta partida de pérdidas sin reposición. Menos decir amén lo que sea.
PD. Disculpad que hay rescatado esta imagen de archivo pero no me parecía bien copiar de lo que sacan medios como ABC en la portada de hoy.
8 comentarios:
Ayer por la noche hice algo que no suelo hacer casi nunca: ver un telediario. Me enteré que cuatro mujeres habían sido asesinadas. Soy un ser tranquilo, poco dado a las estridencias emocionales, pero ayer estallé. No puede ser. Esto no puede durar más, me dije. Y enseguida pensé en esos barrios, en esas ciudades en donde vivían las víctimas. ¿Por qué no salimos a la calle de una vez? A exigir, a gritar, a romper si es preciso. Cualquier cosa menos soportar este indecente ejercicio de mirar para otro lado. Porque es eso. Exactamente eso: mirar para otro lado. Política de avestruces. Inmoralidad social. A los políticos ya los conocemos, a los jueces también. Entonces... ¿hasta cuándo nos vamos a quedar con las manos cruzadas? ¿Hasta cuándo?
Y yo me pregunto: ¿nadie lo sabía? ¿nadie oyó nunca una discusión, un quejido, un golpe? nadie vio unos labios hinchados o un ojo amoratado? Y si alguien lo oyó... puede dormir?
Aquí en Chile las cosas no son muy distintas. Hasta el 15 de febrero iban 13 femicidios.
Gritar puede ser una acción tan terriblemente difícil cuando falta apoyo, y valentía para evitar que caiga sangre, por algo que siempre, no vale la pena, porque si nos damos cuenta siempre se originan por alguna estupidez (la comida tarde, los celos, y blabla).
Me alegra que hayas dedicado una entrada a este tema que lamentablemente cada día se hace más fuerte.
Un beso
=*
Muy interesante tu blog voy a volver me ha gustado mucho lo mismo que tu comentario, te dejo besos y flores
Cuando yo era pequeña, existía un periódico que se llamaba "el caso"Mientras mi abuela o mi tía guisaban para los clientes, un camarero las leía los crímenes y yo me decía que que cuentos más feos les leía. Sinceramente y por desgracia, creo que hay cosas que no cambian y en este caso aumentan por la emancipación de la mujer.
Un besote y buen finde
Mi abuelo era un fiel lector de El Caso y sus relatos de la España negra que aún no hemos podido sacudirnosla del todo.
A pasarlo bien.
Que coicidente, con lo que ocurre en mi país a raiz de lo mismo decidí protestar, encuentro mucha razón al comentario de María Los Angeles.
Saludos bicha del sur
Nómada
La verdad es que este es un problema planetario, acá en Chile, también toma caracteres alarmantes.
Causas podrían haber muchas,el tipo de soc que estamos construyendo, la enseñanza que reciben nuestros niños en escuela y también en su hogar.
Sin embargo, muy pronto nos vamos dando cuenta que la cosa va por el lado de la maravilla económica ,social y política denominada globalización.
Quiero que conozcas el blog de una amiga Carol , ella ha destinado gran parte de él a denunciar esta lacra del femicidio
http://onlinecarolonline.blogspot.com/
Saludos
Juan Carlos
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